Las fuertes lluvias y el desbordamiento de ríos han generado inundaciones generalizadas en diversas regiones de Costa Rica, afectando a miles de personas y ocasionando graves daños. La Cruz Roja Costarricense ha reportado hasta el momento 274 emergencias relacionadas con las lluvias, así como la trágica pérdida de dos vidas humanas y la desaparición de otras dos personas.
El caos provocado por las lluvias ha sido especialmente notorio en las provincias de Guanacaste y Puntarenas, donde los ríos desbordados han inundado comunidades enteras. Las autoridades han instado a la población a mantenerse alerta, ya que las condiciones climáticas continúan siendo impredecibles y podrían empeorar en las próximas horas. La alerta naranja se mantiene en casi todo el país, y el Instituto Meteorológico Nacional no descarta la formación de un giro ciclónico en el territorio costarricense.
Acciones de rescate
El personal de la Cruz Roja, junto con otros cuerpos de emergencia, ha llevado a cabo intensos trabajos de rescate. En la zona de Río Cañas Viejo, se evacuaron a 46 personas de áreas inundadas, de las cuales 39 eran adultos y 7 menores de edad. Estas personas fueron trasladadas a lugares más seguros.
En la comunidad del Bambú, en Filadelfia, otro operativo de rescate permitió evacuar a 15 personas, incluyendo 7 adultos y 8 niños, quienes fueron reubicados en un albergue cercano para garantizar su seguridad.
Desafíos y medidas preventivas
Con las lluvias aún activas, las autoridades han tomado medidas preventivas, cerrando algunas rutas y emitiendo alertas en zonas vulnerables. Los rescatistas han destacado la importancia de actuar con rapidez y cercanía para minimizar los daños y proteger a la población afectada.
La Cruz Roja Costarricense, comprometida con su misión de salvar vidas y aliviar el sufrimiento humano, continúa trabajando sin descanso para ofrecer apoyo a los afectados por las inundaciones. Las autoridades recomiendan a los habitantes de las zonas vulnerables mantenerse informados y seguir las indicaciones de seguridad para evitar más tragedias.
El país permanece en constante monitoreo, esperando que las condiciones mejoren en las próximas horas, aunque los pronósticos apuntan a que el temporal podría continuar al menos hasta este martes.