- Se trata de una mujer de 54 años, dos hijas y una nieta
- Un ciclista que iba pasando también colaboró en el rescate al solicitar ayuda vía 9-1-1
- En el 2019 este mismo guardacostas participó en el rescate de un hombre de 80 años y su nieto de 12 en esta misma playa
En una muestra más del espíritu de servicio que caracteriza a los cuerpos policiales del Ministerio de Seguridad Pública, un oficial del Servicio Nacional de Guardcostas, en su tiempo libre, le salvó la vida a cuatro mujeres de una familia turrialbeña que se estaban ahogando en playa Caldera, cantón de Esparza, Puntarenas.
Se trata del inspector Klever Paco Samudio, un experimentado rescatista de la Estación de Guardacostas de Puntarenas, ubicada en Caldera, quien ya ha auxiliado a otras personas precisamente en esta misma playa.
El hecho tuvo lugar la mañana del sábado, cuando el oficial Paco se dirigía en motocicleta desde su casa en Barranca hacia la citada estación, a fin de iniciar su turno laboral.
Es por ello que, al percatarse de que varias personas se estaban ahogando, de inmediato se introdujo en el mar, logrando sacar a una mujer identificada como Veracruz Carvajal Romero, de 54 años, así como dos hijas de ella, de nombres Nayely Serrano Carvajal, de 15 años y Pamela Serrano Carvajal, de 33 años y una de esta última, hija de tres años de edad.
De ellas la que se encontraba más afectada era la señora de 54 años, la cual fue trasladada al Hospital México por parte de la Cruz Roja en condición roja.
De acuerdo con lo reportado por el inspector Paco Samudio, a la operación de rescate se sumó un ciclista que iba pasando por el lugar, quien se encargó de llamar al 9-1-1, gracias a lo cual la Cruz Roja llegó en aproximadamente dos minutos al sitio del suceso para brindarles asistencia a las mujeres.
Cabe indicar que dicho oficial ha realizado diversos rescates, algunos de ellos en esta misma playa, como el registrado en abril del 2019, cuando, al lado de los oficiales Darwin Coro Abarca y Marvin González Morales, participó en el rescate de un adulto mayor de 80 años y su nieto, un niño de 12 años, los cuales fueron arrastrados por una ola.