En un ejemplo de cooperación internacional y trabajo comunitario, oficiales de la Fuerza Pública de Costa Rica, junto a brigadistas de El Salvador, se dedicaron a limpiar y remover escombros de las vías afectadas por las lluvias recientes en la comunidad de Bebedero, Cañas, Guanacaste.
Las intensas precipitaciones dejaron caminos anegados y llenos de escombros, dificultando el acceso a esta localidad. En respuesta, los equipos de ambos países se unieron para restaurar la transitabilidad en la zona y facilitar el acceso de servicios esenciales a las familias afectadas.
El trabajo en equipo y la dedicación de los brigadistas y oficiales son un recordatorio del poder de la solidaridad entre naciones para enfrentar las adversidades climáticas. Este tipo de acciones no solo representan un alivio inmediato para las comunidades impactadas, sino que también fortalecen los lazos de cooperación y hermandad entre Costa Rica y El Salvador.
Las labores de limpieza continúan, mientras las autoridades hacen un llamado a la población para mantenerse alerta ante nuevas lluvias y seguir las recomendaciones de los cuerpos de emergencia.