La madrugada del lunes, durante un operativo rutinario en el puesto de control de Kilómetro 35 en el distrito de Guaycará de Golfito, las autoridades costarricenses detuvieron a un hombre sospechoso de tráfico ilícito de personas. La intervención fue realizada por oficiales de la Policía de Fronteras y de la Fuerza Pública, quienes, al revisar un vehículo que venía de la frontera sur, detectaron una irregularidad en el número de pasajeros.
El microbús, con capacidad para siete personas, transportaba en total a doce, incluidos el conductor y once pasajeros en condición migratoria irregular. El sospechoso, un hombre de nacionalidad nicaragüense de apellido Hernández, residía en Costa Rica. Sus acompañantes, también nicaragüenses, tenían como destino la provincia de Heredia y aparentemente provenían de Río Claro de Golfito.
Tras el hallazgo, las autoridades policiales coordinaron con la Fiscalía de Flagrancia de Corredores, a donde Hernández fue remitido la mañana del lunes para enfrentar posibles cargos por tráfico ilícito de personas. Este delito en su modalidad ordinaria puede acarrear penas de 2 a 6 años de cárcel; sin embargo, en casos agravados, las condenas pueden oscilar entre 3 y 8 años.
Los pasajeros en situación irregular fueron presentados como testigos ante la Fiscalía y luego entregados a las autoridades de Migración para su respectivo proceso.
Este tipo de acciones policiales responde a los esfuerzos del Ministerio de Seguridad Pública para combatir el tráfico ilícito de personas y otros delitos transfronterizos en la zona sur del país. La intervención oportuna en el puesto de control de Kilómetro 35 refuerza el compromiso de las autoridades por prevenir actividades ilegales en las fronteras costarricenses.
