La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) podría destinar hasta ¢8 186 millones para garantizar, durante seis meses, las estrategias incluidas en el plan de continuidad de los servicios de salud, debido a la posible renuncia de médicos especialistas cuyo salario compuesto es inferior al salario global. Esta estimación general fue conocida este jueves por la Junta Directiva de la institución.
Según explicó la presidenta ejecutiva de la institución, MSc. Laura Ávila Bolaños, el ejercicio de costeo se logró luego de que las gerencias involucradas en el desarrollo del plan de contingencia analizaron a profundidad los diversos aspectos que conlleva la implementación de estas acciones, las cuales buscan proteger el derecho a la salud de las personas.
“El plan institucional tiene como centro a los pacientes y busca minimizar la posibilidad de que nuestros asegurados se queden sin atención especializada a causa de la ausencia por renuncias de un médico”, aseveró la máster Ávila.
La jerarca agregó que el deseo de la administración activa de la institución es que los médicos especialistas no renuncien, por lo que el escenario ideal es que esta previsión de fondos no se deba utilizar.
Por su parte, el gerente financiero de la institución, MBA. Gustavo Picado Chacón, explicó que esta estimación del costos, presentado ante el órgano colegiado de la CCSS permitirá conocer con cierto grado de razonabilidad, los gastos en los que se incurrirá para ejecutar las cinco estrategias clave, que fueron conocidas por el máximo órgano de la institución días atrás.
Las estrategias incluyen la ampliación de la cobertura del centro de traslados institucional, el fortalecimiento de la gestión local de los centros médicos, la redistribución de la atención según capacidades resolutivas en especialidades críticas, la implementación de modalidades no convencionales de atención y el aumento del recurso humano especializado.
Como parte de la sesión, los directivos recalcaron la importancia de que las unidades técnicas de la institución avancen con prioridad en los análisis que se requieren para determinar la posibilidad de realizar un ajuste técnico a los salarios de los médicos especialistas cuyo salario compuesto se encuentra por debajo del salario global.
“la Junta Directiva urgió a las unidades técnicas para que se aboquen en la elaboración de estos criterios para que estén listos a la brevedad posible”, aseveró la presidenta ejecutiva.
Como parte de lo acordado, la Junta Directiva instruyó a la Gerencia Financiera, con apoyo de las gerencias Médica, Administrativa y de Logística, para que presenten informes mensuales de los montos reales devengados por la ejecución del plan de continuidad de los servicios. Estos informes deberán incluir un análisis de los servicios producidos a lo interno de la institución o contratados a terceros, producto de las estrategias e intervenciones definidas para enfrentar las renuncias de los médicos especialistas.
Los dineros para financiar las acciones del plan de continuidad de prestación de servicios y el eventual pago del ajuste técnico se financiarán por medio del fondo de contingencia del Centro de Atención de Emergencias y Desastres (CAED) y del fondo dispuesto por medio de la Política de Retención y Atracción para Médicos Especialistas (PRAME).